El camino fotográfico está lleno de peligroso que solamente alguien con sabiduría será capaz de sortear.
Por Óscar Colorado Nates*
Hace muchos, muchos años, en una galaxia muy muy lejana yo pensé: “Esto de la fotografía no esa nada difícil, cualquiera puede hacerlo”. Incluso reconocí, inmodestamente, que tenía talento.
Muchos años después me doy cuenta de que era un necio ignorante, o mejor dicho, que sigo siéndolo.
Luego, fui avanzando y conociendo cada vez más de fotografía, primero la técnica, luego el lenguaje y finalmente la cultura visual a partir de estudiar a los grandes maestros. Llegué, entonces, a un momento de depresión total: La fotografía es inconmensurable, reservada a unos pocos privilegiados y conforme más se estudia menos se sabe.
¿Algo de esto te ha ocurrido a ti? Me atrevo a pensar que seguramente sí. Y no lo digo a la ligera porque, en realidad, es algo que nos pasa a todos y quiero compartirte que es, de hecho, lo más común del mundo.
Te sorprendería saber que Justin Kruger y David Dunning, investigadores de la Cornell University, encontraron que había una correlación entre ignoracia-conocimiento y confianza auto-percibida. En 1999 estos académicos publicaron en el Journal of Personality and Social Psychology un paper que estudió la auto-percepción y confianza en relación al conocimiento. Luego de 14 páginas, Kruger y Dunning concluyeron que “…los que tienen un conocimiento limitado en un área sufren un lastre doble: no solo llegan a conclusiones equivocadas y cometen errores lamentables: Su incompetencia les priva la capacidad de darse cuenta de ello.” [1]
Dunning & Kruger encontraron, en esencia, que entre más ignorante es una persona, más da por hecho (erróneamente) la facilidad supuesta de cualquier disciplina, y conforme más conocimiento acumula su auto-confianza disminuye dramáticamente.
Esto, aplicado a la fotografía, cobra aún mayor importancia porque el medio fotográfico puede ser endiabladamente engañoso desde George Eastman y su “usted presione un botón y nosotros hacemos el resto”.[2]
Incluso el propio Ansel Adams reconocía que “…si la fotografía fuera difícil en el verdadero sentido del término, lo que significa que la creación de una simple fotografía implicara tanto tiempo y esfuerzo como la producción de una buena acuarela o grabado, habría una gran mejora en la producción total. La facilidad con que podemos producir una imagen superficial a menudo conduce a un desastre creativo.”[3] En otras palabras: Si hacer fotografías fuera más difícil haríamos mejores fotografías.
De modo que en nuestro medio, la sencillez aparente de la factura fotográfica también es un gran inconveniente, pues el neófito piensa que la fotografía es, en realidad, la cosa más simple del mundo.
Pero en el llamado efecto Kruger-Dunning, aplicado a la fotografía, esta actitud dura muy poco. Conforme se comienza a avanzar, se va comprendiendo primero que no es tan fácil y luego que es, en realidad, muy difícil.
Me viene a la mente un símil con la vida interior: el discípulo ignorante se siente extremadamente confiado, pero pronto se da cuenta de las dificultades y puede llegar a la desesperanza. Con una cierta mentalidad zen podríamos llamar a esta falsa sensación de auto-suficiencia inicial el “Monte de la Ingenuidad”, donde el principiante ignora que está por caer estrepitosamente.
Luego llega lo que podríamos llamar el “Valle de la Desesperanza” que resulta muy peligroso, porque está lleno de arenas movedizas que succionan a quien las pisa y, si no se tiene una gran voluntad, se puede abandonar la marcha y sucumbir.
Luego sigue una larga pendiente de ascenso, que podríamos denominar “La cuesta de la Conciencia”. Requiere una mezcla de conocimiento y experiencia, pero es un arco invertido que ha ido de la inmadurez a la madurez. Entonces todo parece indicar que hay un gran salto, cuando el conocimiento y la práctica se han transfundido en sabiduría, y entonces el maestro ha llegado al culmen para convertirse en un guía, en un iluminado quien se dirá a sí mismo “siempre hay espacio para mejorar”, pero más importante aún “cualquiera puede hacerlo” con la condición aplicar trabajo, disciplina y, sobre todo, humildad. Quien llega a la máxima cumbre es todo un gurú que ha llegado al «Pico de la Iluminación».
El efecto Kruger-Dunning. Clic para agrandar.
* Por Óscar Colorado Nates,
(Ciudad de México, 1969)
Académico, crítico, analista y promotor de la fotografía.
Realizó sus estudios doctorales en Ciencias de la Documentación por la Universidad Complutense de Madrid y de master en Narrativa y Producción Digital en la Universidad Panamericana (Cd. de México) donde es Investigador de Tiempo Completo y Profesor Titular de la Cátedra de Fotografía Avanzada así como Docente de Posgrado en Narrativa y Nuevas Tecnologías.
Autor de libros como Fotografía 3.0; El Mejor Fotógrafo del Mundo; Instagram, el ojo del mundo; Fotografía de Documentalismo Social; Fotografía Artística Contemporánea; El Mejor Fotógrafo del Mundo y Pensamientos Decisivos: 650 reflexiones fotográficas. Editor del blog de fotografía Mirada Universal en el diario El Universal (Cd. de México). Director y conductor del programa de radio Imagen Líquida. Co-creador de Cam-Man, el primer cómic mexicano sobre historia de la fotografía. Conferenciante internacional en foros académicos y de divulgación sobre la fotografía.
Miembro del Seminario de Imagen y Cultura, la Asociación Mexicana de Estudios de Estética, el Seminario Permanente de Análisis y Crítica Cinematográfica (SEPANCINE) o de The Photographic Historical Society (Rochester, NY), entre otras.
Las opiniones vertidas en los artículos y producciones audio-visuales son personales.
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Fuentes de investigación
- Kruger, Justin, y David Dunning. “Unskilled and Unaware of It: How Difficulties in Recognizing One’s Own Incompetence Lead to Inflated Self-Assessments.” Journal of Personality and Social Psychology, 1992.
- Weisberger, Bernard, A. “You Press the Button, We Do the Rest.” American Heritage, 1972. Accedido el 17 de noviembre de 2018. https://www.americanheritage.com/content/%E2%80%9Cyou-press-button-we-do-rest%E2%80%9D.
- “Ansel Adams.” Quotes, s.f. Accedido el 17 de noviembre de 2018 2018. https://www.quotes.net/quote/40201.
Notas
[1] Justin Kruger y David Dunning, “Unskilled and Unaware of It: How Difficulties in Recognizing One’s Own Incompetence Lead to Inflated Self-Assessments,” Journal of Personality and Social Psychology, 1992. Accedido el 17 de noviembre de 2018, https://pdfs.semanticscholar.org/e320/9ca64cbed9a441e55568797cbd3683cf7f8c.pdf
[2] Bernard Weisberger A., “You Press the Button, We Do the Rest,” American Heritage, 1972, accedido el 17 de noviembre de https://www.americanheritage.com/content/%E2%80%9Cyou-press-button-we-do-rest%E2%80%9D.
[3] “Ansel Adams,” Quotes, s.f. Accedido el 17 de noviembre de 2018, https://www.quotes.net/quote/40201.
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La aparente «facilidad» de hacer una foto está dada en el hecho de que se consigue con una máquina, de modo que accionando el botón cualquiera puede obtener un resultado, lo cual no ocurre con la pintura. Sin embargo y si algo he aprendido yo de fotografía es precisamente que hacer una BUENA FOTOGRAFÍA es algo ciertamente difícil. No me es ajeno el Valle de la desesperanza!! Pero si algo tengo que agradecer a este hermoso arte es el haberme dado la posibilidad de soñar con hacer algún día una GRAN FOTOGRAFÍA y eso, a mis años, es como tener una segunda oportunidad de juventud.
Como siempre, Óscar, excelente trabajo. Un abrazo!!
Muchas gracias Ernesto. Creo que lo importante es siempre trabajar sin desfallecer. ¡Te mando un abrazo muy fuerte!
no opino pero si le digo: simplemente brillante , con su permiso comparto en mi facebook
Por supuesto Fran, gracias por compartir. ¡Saludos!
Buenas,
Qué grata casualidad, hace unas semanas escribí en mi blog sobre el mismo problema de la percepción aplicándolo también a la fotografía, aunque con un enfoque diferente… https://www.fotolarios.es/2018/10/efecto-dunning-kruger.html
Se trataba de la continuación de otro artículo sobre la que creo que es la otra cara de la moneda, el ‘Síndrome del Impostor’… https://www.fotolarios.es/2018/09/el-sindrome-del-impostor.html
Me ha gustado tu artículo y la coincidencia, enhorabuena 😊👍
Estimado Carlos, efectivamente, feliz coincidencia (serendipia, no cabe duda) y es que -efectivamente- el efecto Kruger-Dunning está relacionado de algún modo con el síndrome del impostor. ¡Felicidades también por tu trabajo!
La psicología tiene la enorme habilidad de ponerse a estudiar características del comportamiento humano que siempre se han conocido, comprobar que ese conocimiento popular era correcto y luego poner un nombre a la cosa. Sabemos que ese efecto ocurre en todos los ámbitos del conocimiento humano, desde el niñato que cree saber de todo más que sus padres, hasta el reputado científico que pontifica sobre cosas como universos paralelos sin conocer siquiera lo que está ocurriendo realmente, no en el Universo que habita, si no en su propia casa. Así somos.
El ejemplo comparativo con la pintura y el esfuerzo requerido para estar en esta última pudo ser acertado hace tiempo, pero su situación actual es prácticamente la misma que tienen la fotografía y está llena de «afectados».
No obstante el empeño, el citado efecto no será nunca reonocido por quien lo pacede, pues su propia incompetencia le niega la capacidad de reconocer los signos y solo una «ayuda» externa puede situar al afectado en el punto justo de esa escala que mencionas y entonces sí, progresar.
Buen artículo.
Gracias por el comentario. Efectivamente, la aplicación de este efecto es, como bien apuntas, universal. Creo que la simple toma de conciencia respecto de la importancia que tiene el experimentar, conocer y entender y, al mismo tiempo, no desfallecer, puede ser de utilidad en cualquier ámbito y lo he aplicado, en particular a la fotografía. Gracias por compartirnos tus reflexiones que abren horizontes sobre estos temas. ¡Saludos!
Hace un tiempo ya leí sobre este «síndrome»:
https://www.fotolarios.es/2018/10/efecto-dunning-kruger.html?m=1
Lo curioso es que me he encontrado con ello en numerosas ocasiones, pero quedándose en la etapa del Monte de la Ingenuidad. Al final hay pocos que pasen de esa etapa, ya sea por falta de tiempo, falta de motivación o simplemente demasiado ego.
Muchas gracias por el artículo.
Saludos.
Efectivamente, el problema es que en cuanto se advierte que hay una auténtica dificulta al abordar un tema seriamente, con frecuencia se le abandona. Gracias por el comentario y saludos.
Me encantó el video!! Muy divertido!
Saludos 🙂
🙂
Óscar:
¡¡Sencillamente fantástico tu artículo!!. Es un continuo llamado a la humildad para que estemos atentos, haciendo todo lo que podamos, sin desfallecer por lo que no sabemos, ni envanecernos por lo ya sabido. ¡Gracias!
Francisco José.
Exactamente Francisco, ese justo es el espíritu: nunca desfallecer pero saber que siempre hay espacio para aprender. ¡Un abrazo!
Yes, it is true…the more one learns, the more there is to learn.Thank you for this thoughtful article!
Thank you James, much appreciated.
Estimado Óscar,
Cuanta razón llevas, es un camino de aprendizaje duro, donde efectivamente la mayoría pasamos por las etapas y estados de ánimo que comentas, me encanta lo gráficamente que lo has expuesto ¡enhorabuena maestro! 🙂
A mi también me interesa mucho ver los obstáculos y puntos de apoyo en cada etapa. Hace un tiempo compartí contigo una especie de camino o progresión en la fotografía, que de alguna forma, venía a hablar de estos distintos puntos madurativos, que tan estupendamente has tratado en tu artículo.
Muchas gracias por tus reflexiones y aportaciones, siempre estaremos en deuda contigo 🙂
Un fuerte abrazo,
Braulio
Muy querido Braulio, siempre un gusto compartir contigo. Te mando un abrazo muy fuerte también de vuelta.
Muy bueno,cuanto mas voy aprendiendo,mas me doy cuenta lo poco que se. La gráfica un gran resumen y lo escrito arriba genial :). ….por Oscar Colorado Nates.
Un saludo !
Gracias Richard, qué bueno que notaste ese pequeño guiño 😉
Muy buen articulo y totalmente de acuerdo si se aplica a la fotografía analógica y en el campo exclusivamente técnico, donde había que saber mucho para hacer una foto mediocre y muchísimo para poder controlar el proceso-resultado y hacer buenas fotos.
Muchos piensan que hacer fotos con una cámara digital tipo teléfono o cámaras automáticas, no es hacer fotografía, no es así, sencillamente es otro tipo de fotografía, en la que no hay que saber casi nada de técnica, sin embargo esta modalidad, ha democratizado la fotografía y se ven algunos trabajos maravillosos (entre «montañas» basura), con mucha sensibilidad y gusto, preciosas imágenes realizadas por «ignorantes» de la técnica fotográfica, que jamás hubiésemos visto si existiese solo la fotografía analógica.
Estos casos en los que la técnica no cuenta pero la sensibilidad si, se escapan al efecto Kruger-Dunning.
Hola. Qué bueno que has abordado este tema. El 2016 retomé la fotografía. Me compré una réflex digital después de haber tenido mi última cámara réflex hace 20 años, cuando solo se usaba negativo, blanco y negro, Ilford, 400 Asas… eso era lo «profesional». Desde el primer día con mi réflex digital entendí que sabía muy poco y este 2018 pasé por el valle de la desesperanza. Creo que leer tanto a gente como tú me ha ayudado, me ha ido mentalizando y entiendo perfectamente que el camino es largo, para asumirlo con calma. Gracias por compartir tu sabiduría. Saludos.
Hola Rafael, muchas gracias por compartir tu experiencia. El otro día leí algo que me parece que funciona muy bien para cuando uno está en el Valle de la Desesperanza y es «Progreso, no perfección». La clave creo que está en persistir a pesar de la propia opinión, y a pesar de la opinión ajena. Hacer lo que uno tiene que hacer. ¡Saludos y mucho ánimo!
Lo tomaré en cuenta. Muchas gracias.
Waooo,excelente entrada creo que todos debemos tener como referencia esta infografia modificada por usted,pero muy explicativa donde muesta que el camino de la fotografia es duro pero con un final muy gratificante,gracias por compartir.
Sí, la siembra es amarga, pero la cosecha muy dulce.
Ojalá y algún día lleguemos a la iluminación
Oh si, pero al menos pasar los primeros dos o tres escalones ya es un avance ¿No? Abrazo
jajaja
Aún no lo he leído, sólo he empezado el vídeo pero me encantaaaa!!! jajaja
Sinceramente, nunca fue tan entretenido estudiar fotografía!
Que sepas que apareces como referente en mi programación didáctica en la que incluyo entre la bibliografía uno de tus libros, así como tu blog como recurso educativo y por supuesto el podcast de imagen líquida junto a Ulises Castellanos! 😉
Ahora también el efecto Kruger-Dunning me sirve para explicar cómo la actitud frente a la genialidad, el trabajo y la constancia frente a los golpes de suerte serán fundamentales a la hora de que la totalidad del alumnado pueda lograr sus objetivos.
He estado pensando y en lugar de la cuesta de la sabiduría voy a adaptar tu adaptación y hablar de la ola de la sabiduría, me parece que la cuesta al final solo remite al esfuerzo y la idea de surfear en la ola de la sabiduría, de mantenernos en la tabla, de volvernos a subir cada vez que caemos…creo que está más ligado a la idea de gozar la vida…en este caso, de disfrutar de nuestro ikigai, que es la fotografía, al tiempo que hacemos el esfuerzo por no caernos! Además el tema de la tabla como la ayuda, como los recursos que tenemos o que utilizamos para mantenernos en pie…a veces necesitamos de ayuda, está bien aprender a pedirla o descubrir dónde encontrarla!
Tu blog, tus videos, desde luego, han sido una gran tabla para mí, estoy surfeando y si me caigo ya sé dónde venir para recomponerme!
Gracias, de nuevo!
Maria
Hola María, me ha gustado mucho tu idea de surfear la ola de la sabiduría. ¡Muchos saludos y gracias por compartir!