Lectura fotográfica: El minuto de oro

¿Cuánto le dedicamos hoy en día a leer una fotografía? Mucho menos de lo que deberíamos.

Por Óscar Colorado Nates*

En la iniciación a la lectura fotográfica decíamos que  había que dejarse llevar por el gusto personal, ir a buscar libros y escoger algún volumen que despertara nuestro interés.

Después de algunas visitas a la librería iremos encontrando qué autores nos llaman la atención.

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André Kertész. Hombre leyendo.

El siguiente paso es una lectura un poco más ordenada, pero que todavía no debe imponernos demasiadas reglas ni complicaciones; el objetivo sigue siendo disfrutar al máximo del proceso.

Primer repaso y banderas

Antes que nada, aunque se puede hacer lectura fotográfica en una pantalla de computadora, un iPad o incluso el teléfono móvil, es muy importante en esta etapa el acercarse al proceso de contemplar la fotografía en un libro. Esto asegura una aproximación más pausada, donde el libro como objeto le da un soporte a la fotografía y permite una experiencia más interesante, con menos prisa y sensorialmente más rica.

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Cuando se tiene un libro de fotografía nuevo, es buena idea hacer un primer repaso rápido a todas las fotografías. Realmente se trata de dar un vistazo y detectar aquellas imágenes que nos parezcan especialmente intrigantes.

Siempre es útil usar banderitas de colores. Pueden ser Post-it® o de cualquier otra marca.

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Con ellas podremos organizar las secciones del libro para que sean fácilmente accesibles y también marcar aquellas fotografías que han llamado nuestra atención.

Una máquina rotuladora también es muy útil para escribir pequeñas etiquetas e identificar rápidamente las secciones que marcamos con las banderitas.

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Las banderas serán una manera sencilla de regresar, con más calma, a esas fotografías que sentimos que vale la pena examinar con más calma. También nos permiten identificar rápidamente una imagen que nos haya interesado en particular y que conviva con otras fotografías en una misma página o un detalle importante. 

Lo que pueden descubrir 60 segundos: El minuto de oro

Hoy estamos acostumbrados a dedicarle un tiempo mínimo a las fotografías. Buena parte de la responsabilidad está en el comportamiento que hemos desarrollado en las redes sociales. Pasamos de una imagen a otra sin apenas verlas: Tan solo unas cuantas fracciones de segundo. Pensemos en el tiempo que vemos una fotografía en Instagram.

Fotografía © Androidpit.es
Fotografía © Androidpit.es

Con el tiempo tan reducido que brindamos a las fotografías en las redes sociales, estamos perdiendo la capacidad de observar, ya no digamos de contemplar.

El siguiente ejercicio suelo realizarlo con mis alumnos en la universidad y es bastante ilustrativo:

Vale la pena hacer una pausa y dedicarle a cada foto que marcamos un minuto. Como el tiempo tiene su propia percepción, habrá a quien 60 segundos les parezcan una eternidad y otros a quienes les parezca insuficiente. Vale la pena hacerlo con un temporizador de cuenta regresiva para dedicarnos a ver la foto y no a medir el tiempo.

Es importante tratar de no dispersarse ni distraerse durante ese minuto. Ciertamente que una fotografía puede comenzar a provocarnos asociaciones e ideas, pero siempre vale la pena mantener a raya la imaginación para concentrarnos en la foto y contestarnos, en primer lugar por qué esa imagen nos ha llamado la atención.

El libro Los Americanos de Robert Frank es todo un clásico que no puede faltar en una biblioteca fotográfica; hemos publicado aquí la colección íntegra. Este trabajo tiene esa característica de los textos fundamentales que nos permite volver a ellos una y otra vez. Este volumen tiene 83 fotografías, de modo que tendríamos que dedicarle, al menos, una hora y 23 minutos para leerlo. ¿Cuánto tiempo le dedicas hoy a un libro de fotografía?

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En un minuto se pueden descubrir muchos detalles y conocer más a fondo cada imagen. Ahora bien, hay momentos en los que un minuto sabe a poco. No hay problema: se puede dedicarle otro minuto, y otro, y otro… ¡Los que hagan falta! La disciplina es dedicarle a una fotografía por lo menos un minuto.

La importancia de la contemplación

Cuando se lee una fotografía, cuando contemplamos hay un movimiento interior: La fotografía provoca en nosotros reflexiones, emociones, tal vez una opinión y sin duda, preguntas. Ocurre algo en quien contempla. Pensemos en la pinturas de Mark Rothko: Son imágenes pensadas en que se contemplen y ocurra algo en el observador.

Estas pinturas fueron hechas para que el observador las contemplara y suscitar algo en él. No es raro que se coloquen bancas en los museos frente a estas pinturas.

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Es muy importante al leer fotografías que permitas también esos sucesos interiores que provoca la contemplación. No se trata únicamente de ver, sino de dejar que la imagen provoque sentimientos, reflexiones, ideas o pensamientos en ti. Si le dedicas unas fracciones a una fotografía, ese movimiento interior simplemente no puede ocurrir. Por eso es tan importante dedicar a cada foto por lo menos un minuto.

A manera de conclusión

Con estos sencillos pasos nos vamos adentrando cada vez más en la lectura fotográfica para convertirla en una experiencia más interesante y significativa. ¿A qué foto piensas dedicarle tu próximo minuto de oro?


oscar_colorado_natesÓscar Colorado Nates es crítico, analista y promotor de la fotografía. Es titular de la Cátedra de Fotografía Avanzada en la Universidad Panamericana (Ciudad de México).

Es autor de los libros:

  • Ideas Decisivas: 800 reflexiones fotográficas (2a. Edición)
  • Fotografía 3.0 Y después de la Postfotografía ¿Qué?
  • Instagram, el ojo del mundo
  • Fotografía de documentalismo social
  • Fotografía Artística Contemporánea
  • El Mejor Fotógrafo del Mundo.

Columnista en el periódico El Universal (Cd. de México).
Editor y Director General de la revista fotográfica MIRADAS.

Co-fundador de la Sociedad Mexicana de Daguerrotipia y miembro de The Photographic Historical Society (Rochester, NY).

Las opiniones vertidas en los artículos son personales y no reflejan necesariamente las posturas de la Universidad Panamericana.
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22 comentarios sobre “Lectura fotográfica: El minuto de oro”

  1. Qué gran consejo! Con esta maldita prisa por no se sabe qué, ya no miramos con detalle y no miramos las cosas por el simple placer de disfrutar de ellas.
    Seguiré tu ejemplo

  2. Muy interesante el ejercicio. Yo tengo la costumbre de leer las fotografías, claro, sólo aquellas que llaman fuertemente mi atención. La verdad es que con el bombardeo de imágenes que hay hoy en día, sobre todo en las redes sociales es difícil que la gente se detenga a hacer una lectura como la que propones, sólo a los que nos interesa escudriñar una foto lo seguiremos haciendo. Muy buen artículo como siempre. Saludos.

    1. Muchísimas gracias Ernesto. Efectivamente, coincido contigo en que la gente no se detiene a una lectura, pero precisamente es lo que necesitamos, y más como fotógrafos para crecer un poquito con un esfuerzo que parece minúsculo pero que rinde grandes frutos. ¡Gracias como siempre por tus comentarios!

  3. Toc toc… saludos Master… Estoy por montar mi «muro» en un Café que tenemos aquí… con tu artículo se me ocurrio la idea de poner un letrero de… hummm !!!… «Te reto a ver un minuto»… «Regalate un minuto»… ¿alguna sugerencia?… muchas gracias por compartir…

  4. Mirar, ver y observar son tres cosas distintas. Uno debe de tomarse su tiempo para todo en la vida. Completamente de acuerdo contigo yo diría además que una vez hecho este ejercicio, se puede pasar al siguiente, que es mirar todos los aspectos de la vida como si uno estuviese viendo una fotografía. Excelente tu blog, Oscar. Para mi ha sido un descubrimiento placentero.

    1. Gracias por tu comentario Juan Manuel. Es muy interesante lo que planteas porque así como pasamos de alto tanta cosas en una foto, en la vida corremos el riesgo de vivir este frenesí que nos hace perdernos de lo verdaderamente imporante en nuestra existencia. ¡Gracias por la reflexión! Qué bueno que te ha gusto mi blog, espero que que lo compartas con otros interesados y que sigas revisando y aprovechando estos contenidos. ¡Un abrazo grande!

  5. Habiendo leído este post, tomé mi nuevo libro de fotografías y el cronómetro y le dediqué 60 segundos a una imagen de Hans Aarsman que nunca había visto. Me sobresaltó la alarma, la fijé otra vez y regresé a la foto; volvió a sonar y yo no había terminado de observar…
    Creo que hoy recibí el regalo de la observación consciente. Gracias una vez más.

  6. Me parece oportuno agregar que solo 60 segundos para valorar y leer lo que se nos muestra como resultado fotográfico palpable puede haberle llevado al fotógrafo, en el mejor de los casos, horas – y hasta mucho más – para preconcebir composición, luz y toda la amalgama de elementos que nos quiere transmitir.
    Un abrazo grande,
    Luis

    1. Exactamente, mi querido Luis. Pero también que, muchas veces, es el resultado de un instante (el famoso instante decisivo de Cartier-Bresson) y que esa imagen «tomada al vuelo» puede convertirse en una atrapada -genuina rebanada- del «continnum» espacio-tiemp. ¡Te mando un abrazo grande, querido Luis!

      1. Ese, el instante decisivo, el olfato y la agilidad de lince estuvieron en mente cuando hacía el comentario; pero pensaba más en Ansel Adams y sus sketches sobre papel y la planificación de lo que quería que la toma mostrase.
        De todas maneras, estoy convencido de que Cartier-Bresson se tomaba el tiempo suficiente para elegir un contexto composicional y luego el lince merodeaba la escena hasta que aparecía la presa.
        Siempre un placer, querido Óscar!

  7. Gracias Oscar por el articulo… creo que son pocos los que en estos momentos, leen un articulo y muchos menos los que se atreven a leer una foto como quien contempla una manzana antes de comérsela… esos detalles, o quizás, la mirada que quizo que observáramos el autor… Tantos detalles y tantas lecturas que nos pueden dar una simple imagen… Un momento congelado en el tiempo que en verdad, nos permite transportarnos al pasado o al futuro, según como la lectura nos embriague o nos haga imaginar y crear mas adelante… Saludos y un abrazo de Luz.

    1. Pablo, muchas gracias por el comentario. Efectivamente, si todos disfrutáramos una foto como quien contempla una manzana antes de comérsela lograríamos obtener todo el nutrimento para nuestro corazón. ¡Muchos saludos y gracias por visitar este espacio!

  8. Hola Oscar, encontré tu blog por casualidad, buscando información sobre el lenguaje fotográfico (pretendo escribir un libro/manual práctico sobre el tema, ya veremos…) y tu artículo superó mis expectativas hasta el punto de que no he hecho más búsquedas.

    He ojeado tus artículos y ya te digo desde ahora que continuaré leyéndome todo lo que pueda, poco a poco.

    Pienso que lo que comentas en este artículo es de suma importancia. Para mí cada fotografía es una historia condensada en una imagen, pero como tu bien dices, poco tiempo empleamos en visionar una imagen y nos quedamos con el primer golpe de vista, con el objeto, el paisaje, o lo que sea que muestra la foto. Nos quedamos en el nivel superficial, con el plano físico como a mi me gusta decir.

    Dicho esto, para mí lo importante es el plano mental, lo que la imagen quiere transmitir, los indicios que nos muestra la imagen en base a los elementos secundarios que se combinan, igual de importantes que el objeto principal.

    Quizás al visionar una imagen debemos buscar la respuesta a la pregunta ¿que es lo que nos quiere transmitir? Así pues, lo importante no es lo que se muestra, sino cómo se muestra, y para ello hace falta recrearse y analizar, y dedicarle tiempo necesario.

    Tengo mis dudas acerca de si me expreso con propiedad a la hora de utilizar algunos términos. Es uno de mis miedos que tengo al pretender escribir el libro. Bueno, espero que se haya entendido.

    Pues nada, mil gracias por compartir tanta información de calidad!

    1. Estimado Juan Carlos, muchas gracias por lo que escribes. yo creo que cuando hay una preocupación por compartir entonces uno debe expresarse. Tu inquietud de escribir un libro me parece maravillosa. A veces uno se confunde mucho porque nuestro cerebro hace mil conexiones y, el poner las cosas por escrito, nos ayuda a organizarnos. de modo que te animo mucho a que emprendas este camino maravilloso y que puedas reflexionar y ayudarnos a reflexionar sobre la fotografía. De modo que enhorabuena, y muy interesante esto que escribe sobre el «plano físico». Sigue investigando, hay mucho por saber de estos temas. ¡Muchos saludos!

Responder a Pablo Cabrera TrabuccoCancelar respuesta